Clorosis férrica – Tratamientos comerciales y caseros para las hojas amarillentas de tus plantas
Si estás en este post, probablemente sea porque una de tus plantas tiene las hojas amarillas y sospeches que se pueda tratar de clorosis férrica. En este post te enseñaremos qué es la clorosis férrica, cómo identificarla y qué medidas puedes tomar para remediarla. No entraré en detalles muy técnicos, pero te contaré mi experiencia y cómo lo solucioné.
- Clorosis férrica – Tratamientos comerciales y caseros para las hojas amarillentas de tus plantas
Hojas amarillentas en tus plantas: Causas
Cuando detectamos que nuestras plantas están empezando a amarillear, la mayoría de personas te dirán que tu planta tiene clorosis férrica, pero no siempre es así, puede haber otros factores que hagan que las hojas de tus plantas se pongan amarillentas:
Exposición excesiva al sol
Si la planta es de sombra (como la hortensia de la imagen) y ha recibido excesiva exposición al sol puede empezar a amarillear, en este caso detectaremos se pone amarilla la hoja completa (incluida la nervadura de la hoja).
Falta de nitrógeno
El nitrógeno (N) es importantísimo en aportar crecimiento y verdor a nuestra planta. Si tu planta ha estado por mucho tiempo en una maceta pequeña, es probable que haya agotado sus nutrientes y que necesite alimento, como ha pasado con esta hierbabuena.
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Falta de hierro
Aquí llegamos a la famosa clorosis férrica, que no es otra cosa que la falta de hierro que necesita la planta. En este caso un indicativo importante de que nuestra planta está sufriendo clorosis férrica será cuando la nervadura de la hoja es de color verde oscuro, mientras que el resto de la hoja está amarillenta (como podemos observar en la imagen). Pero aquí hay mucho más que profundizar, por lo que le dedicaremos este post a la clorosis férrica.
¿Qué es la clorosis férrica y cómo tratarla?
La clorosis férrica es un trastorno que afecta a las plantas cuando carecen de hierro, lo que resulta en hojas amarillentas y poco saludables.
Pero no te preocupes, ¡hay soluciones! El tratamiento de la clorosis férrica implica proporcionar a las plantas el hierro que necesitan para recuperar su vitalidad y su color verde intenso.
Causas de la clorosis férrica
Normalmente, se suele dar en plantas acidófilas y cítricos, que no se están plantando en sustrato ácido, o plantas que se han estado regando con aguas muy duras (con un alto contenido en cal), esto causa una subida del pH del sustrato.
Si la planta no está en un pH adecuado para su desarrollo, no podrá asimilar el hierro de forma correcta y empezará a amarillear las hojas. Tengamos en cuenta que los tratamientos que vamos a enseñar, pueden ser un impulso para la planta en caso de clorosis férrica, pero es super importante tener la planta en un sustrato con un pH correcto para la especie.
Síntomas de la clorosis férrica
Los síntomas de la clorosis férrica pueden variar según la gravedad de la deficiencia de hierro, pero los síntomas más comunes son:
- Hojas amarillentas o pálidas, especialmente entre las venas de la hoja (nervios)
- Venas o nervios de la hoja verdes, mientras que el resto de la hoja está amarilla
- Crecimiento lento o planta debilitada.
Tratamientos efectivos para la clorosis férrica:
A continuación te cuento qué tratamientos comerciales puedes realizar para combatir la clorosis férrica, además te dejaré enlaces para poder comprar el producto por Amazon.
Recuerda que comprando a través de estos enlaces estás ayudando a que éste proyecto siga adelante!!
Abono con Hierro
Un abono especializado con alto contenido de hierro puede ser la solución perfecta para tratar la clorosis férrica en tus plantas. Cualquier abono para cítricos podría servir. En el mercado hay gran variedad, pero en mi caso utilizo el siguiente:
Un abono, que a parte de aportar nitrógeno (fundamental para el crecimiento) y potasio (importante para la floración y fructificación), aportará hierro a nuestra planta, evitando que las hojas estén amarillentas y nuestra planta se debilite.
Aporte de Quelatos de Hierro
Sin duda alguna, esta es la solución más eficaz contra la clorosis férrica. En el mercado podrás encontrar gran variedad de productos para combatir la clorosis férrica, pero principalmente verás Quelatos de Hierro y Sulfatos de hierro. Desde mi punto de vista, son mucho más recomendables los Quelatos de Hierro, ya que son mucho más estables que los Sulfatos.
Un producto bien valorado por los usuarios, y de una marca tan reconocida como es Compo y que sin duda te va a ayudar a combatir la clorosis férrica.
A continuación te dejo un video de cómo aplicar los quelatos de hierro y también te dejaré un enlace al producto que yo estoy usando (lo vendían en el garden más cercano a mi casa)
El producto que podéis ver en el vídeo que pongo a continuación, y que yo mismo utilizo, con muy buenos resultados (a continuación os dejaré una foto del estado actual de la planta un mes después)
Tratamientos caseros contra la Clorosis Férrica
Si quieres ahorrarte un dinerillo, o si simplemente te gusta crear tus propios remedios, ¡estás de suerte! podremos elaborar nuestro propio remedio casero combatir la clorosis férrica, que no es ni más ni menos que sulfuro de hierro.
Os dejo un video corto resumiendo el proceso, pero para más detalle, seguid leyendo el post
Para elaborar nuestro remedio casero, necesitaremos:
- Agua
- Una botella, un bote o cualquier recipiente que se pueda cerrar.
- Clavos, tornillos, tuercas o cualquier otro trozo de hierro oxidado que tengáis a mano.
- Azufre, el típico que se utiliza para huerto y para jardinería en general (os dejo un link de Amazon para que podáis obtenerlo)
Este azufre es bastante económico y con esta cantidad, podréis elaborar muchas dosis de este remedio casero.
En el caso del ejemplo que voy a poner, estoy usando este Azufre, que es el que tenía por casa de un tratamiento que le tuve que dar a mis bonsái, pero cualquier azufre para huertas o jardín podría servir.
El proceso es muy sencillo:
- Llenaremos una botella con 1 Litro de agua aproximadamente, donde diluiremos el azufre (aproximadamente 1 cuchara sopera rasa). El azufre, junto con el óxido de hierro, reaccionará formando sulfuro de hierro.
- Metemos todos un buen puñado de clavos oxidados en la botella con la disolución (o cualquier tipo de resto de hierro oxidado que tengamos a mano)
- Cerramos la botella y agitamos enérgicamente para oxigenar la mezcla y favorecer la reacción. Es importante que aparezcan burbujas en la mezcla.
- Es importante removerlo 2 o 3 veces al día para seguir oxigenando la mezcla. Este proceso lo realizaremos durante 12 días aproximadamente (la imagen es del sexto día y ya podemos apreciar un cambio de color importante).
Pasados los 12 días, la mezcla habrá adquirido un color mucho más oscuro, prácticamente hierro (como el que vemos en la imagen), por lo que nuestro sulfuro de hierro ya estaría listo.
Para aplicarlo, diluiremos nuestro sulfuro de hierro con agua, y dependiendo de la gravedad de la clorosis férrica, podremos diluirlo entre el 20% y el 50% en agua.
Conclusión
La clorosis férrica es super común en nuestras plantas acidófilas y/o cítricos, por lo que yo recomendaría tener siempre a mano quelatos de hierro. Son baratos, de acción rápida y muy efectivos. Los remedios casero están bien, si eres de esas personas curiosas a las que les gusta hacerse sus propios remedios, pero la diferencia de precio tampoco va a ser muy grande (entre comprar el azufre y los quelatos) y para hacer bien este remedio, necesitarás 12 días y tener a mano hierro oxidado, estar removiendo la mezcla, etc.
Por otro lado, estos remedios son una solución a corto plazo para la clorosis férrica, ya que no es que a la planta le falte hierro, sino que no está en un pH adecuado para asimilarlo, por lo que recomendaría trabajar sobre la base del problema y tener un sustrato adecuado para cada especie.
Una vez más, espero que este post os haya ayudado, y que sigamos echándole abono a este proyecto.
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